¿Qué se celebra el Día Mundial del Transporte Sostenible?
El mes de noviembre acoge la celebración del Día Mundial del Transporte Sostenible para reconocer el papel relevante del transporte en la sociedad y favorecer el desarrollo sostenible del mismo.
El pasado mes de mayo, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas adoptó una resolución, presentada por el Gobierno de Turkmenistán a raíz de la iniciativa de la Organización Internacional para el Transporte por Carretera (IRU, por sus siglas en inglés), para establecer el día 26 de noviembre como Día Mundial del Transporte Sostenible.
Esta sentencia invita a conmemorar este día mediante la celebración de eventos de carácter pedagógico, con el fin de concienciar y ampliar los conocimientos de la gente sobre el transporte sostenible, especialmente sobre la mejora de la conectividad, la promoción de una movilidad respetuosa con el medio ambiente, el desarrollo de infraestructuras de transporte inclusivas desde el punto de vista social y otros aspectos de la sostenibilidad del transporte. A su vez, anima tanto a organizaciones públicas como privadas a aunar esfuerzos y aumentar la colaboración en pro del desarrollo de la movilidad más eficiente y comprometido con el medio ambiente.
Históricamente, el transporte ha servido como motor del desarrollo económico, fomentando la actividad comercial, la movilidad y la conectividad entre personas. Sin embargo, junto al sector industrial, constituye una de las principales fuentes de emisiones de gases nocivos para el planeta. Por lo que, dar respuesta a esta problemática se convertía en un asunto prioritario.
Es así como nace el concepto del transporte sostenible, que busca lograr una movilidad eficiente, asequible y accesible acorde con un desarrollo respetuoso con el medio ambiente, mientras se promueven avances económicos y sociales que tengan en cuenta las generaciones futuras.
El transporte sostenible no solo ofrece infraestructuras de calidad y servicios para garantizar la movilidad de las personas, si no que sirve como base para alcanzar objetivos transversales como el desarrollo económico, la cooperación internacional o la reducción de la desigualdad social, desde una perspectiva sostenible y beneficiosa con el entorno.